El Sindicato Unidos Trabajadores Custodios Argentinos (SUTCA) que representa a custodios, vigiladores y trabajadores de seguridad privada se solidariza con el Sindicato de Camioneros en momentos en que el gobierno nacional pretende aplicarle una multimillonaria multa por la supuesta violación de una Conciliación Obligatoria (Nota publicada por Agencia Comunas).
En un comunicado de prensa de la Organización, que a nivel nacional conduce Christian López, marcan su oposición a la aplicación de la mencionada multa, transformada ahora en un embargo preventivo que se hace efectivo en tiempo record, a solo 48 horas de finalizada la feria judicial, a lo que definen como un intento de disciplinamiento hacia el Movimiento Obrero y en particular hace los gremios que se oponen a este modelo económico que solo beneficia a los sectores concentrados de la economía. Quieren vernos arrodillados y sumisos frente a este verdadero saqueo que están perpetrando, frente a esta monumental transferencia de recursos desde los sectores populares hacia las petroleras, mineras, bicicleta financiera y el complejo agroexportador.
No hay que equivocarse, no van solamente contra Camioneros, van contra aquellas organizaciones gremiales, sociales y políticas que desafían las órdenes ahora emitidas desde Washington por el FMI que pretende continuar con el ajuste pisando los salarios, recortando las jubilaciones y pensiones, imponiendo tarifazos impagables en los servicios públicos, mientras que se dispara la inflación, se destruye la industria nacional y se producen cientos de despidos diariamente. Por estas horas planean aplicar otra multa a los Docentes de la provincia de Buenos Aires, lo que ya traza el camino que van a seguir.
Sabemos que el ajuste no tiene límites. Siempre van por más. Con las mismas recetas el FMI en 8 años impuso 13 veces rebajas de las jubilaciones en Grecia y en el último informe duda de la capacidad de pago de la deuda del país integrante de la Unión Europea. El límite solo lo pone la resistencia de los ajustados, del pueblo organizado y unido en un programa de acción y en una propuesta programática que vuelva a poner en el centro el trabajo, el desarrollo nacional, la educación, la salud y la soberanía política.
Es hora de unificar todos los movimientos de fuerza que se dan aisladamente para lograr ser más eficaces y contundentes a la hora de la defensa de los intereses de los trabajadores.